sábado, 25 de agosto de 2007

Galería de la Academia

Vittore Carpaccio, gran descubrimiento. La Galería de la Academia de Venecia es un edificio que se está cayendo. La fachada está cubierta por un anuncio publicitario de Dolce & Gabbana. Las paredes están fracturadas, el suelo tiembla. Bea temía que la galería se viniese abajo con nosotros dentro. Impactos fulminantes: La Piedad de Tiziano, espectacular. El rapto del cuerpo de San Marcos del Tintoretto es otra de las piezas fundamentales del edificio. Apreciamos nuestro primer Tiépolo. Nunca me gustó Tiépolo, me parece un artista barroco más. Para nuestra desgracia sensorial, las salas que tenían trabajos de Giorgione y Canaletto estaban cerradas por mantenimiento. El hallazgo, que a ambos nos sedujo, fue Vittore Carpaccio. Su serie de Santa Úrsula, a pesar de hallarse en una sala que parece desmoronarse, es espectacular.
Al salir caminamos el Dhorsoduro, nos perdimos buscando el canal. Recorrimos callejuelas y comimos alguna pasta que ya olvidé. En el Castello, la zona más residencial de Venecia, encontramos una taberna véneta, llena de ‘chuletas’ y viejitas italianas, donde tomamos nuestra primera cerveza.
Y mañana…. A Verona.

2 comentarios:

debolichesycopas dijo...

Hola, vi tu blog por casualidad, está muy interesante. Tengo un blog donde me gustaría publicar bares o pubs del mundo. Te invito a que me envíes tu favorito

salud2
Tiranizan

Anónimo dijo...

Saludos,
Que bueno que están disfrutando plenamente su luna de miel. Por estos lares todo está bien.
Tere y José